La educación media-superior en México, es uno de los niveles educativos más descuidados del sistema educativo nacional, ya que es el nivel que menos apoyo presupuestal, con menos apoyo en equipamiento e infraestructura de los últimos años. Aunado a lo anterior, el bachillerato se ha convertido en el “sándwich” entre la secundaria y la preparación profesional lo hace parecer inútil y poco provechoso a los padres de familia.
Se ha constatado que existen tendencias en la educación media-superior en el país, que requieren de un análisis profundo:
• Una expansión cualitativa y cuantitativa.
• Diversificación de las estructuras institucionales, de los programas y de las formas de estudio.
• Restricciones financieras
• Criterios de pertinencia, calidad, vinculación, internacionalización.
Se reconocen además funciones importantes de la educación media-superior en la sociedad presente y futura:
• Anticipación ante el mercado de trabajo, para jóvenes que se incorporan al mismo, terminando su bachillerato.
• Adaptación de los programas de estudio a las nuevas circunstancias, brindando nuevas oportunidades.
• La formación de personal calificado.
• Proporcionar un sistema de formación diversificado.
• Proporcionar un sistema de evaluación diversificado
.
• Propiciar sistemas de estudio y de enseñanza-aprendizaje suficientemente dinámicos.
• Incorporar componentes internacionales importantes.
• Proveer, generar y difundir conocimientos a través de la investigación.
Las acciones que recomienda implementar la ANUIES (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior) para transformar y mejorar la calidad del Sistema de Educación Superior (SIES), que por supuesto incluye al bachillerato, son las siguientes:
• Mejorar el perfil del profesorado y consolidar los cuerpos académicos.
• Ampliar su cobertura.
• Mejorar la eficiencia y pertinencia en los programas académicos.
• Fortalecer la vinculación entre los programas educativos y la investigación.
• Impulsar la innovación.
• Sustentar su operación en redes de cooperación académica.
• Mejorar la gestión académico- administrativa.
• Consolidar el Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación.